Ahora hablaremos de la vida nocturna de Escocia.
Diferente a lo que esperaba, Escocia tiene una vida nocturna divertida, pero no espectacular. Con lo que respecta a los escoceses, ellos son realmente amables y amigables, obviamente ellas: guapas, igual alegres y muy amigables; siempre dispuestas a una charla, a un chiste y a ayudar a un extranjero. Muy nacionalistas (obvio de Escocia y no sintiéndose británicos) de hecho en varios lugares se siente el ambiente separatista a la Gran Bretaña. En cuanto a su gente, si son muy evidentes las diferencias con los ingleses, sobre todo en el trato humano.
Está experiencia de vida nocturna fue durante un viaje a las destilerías de whisky, en donde en las noches, al estar cerradas las destilerías, pues teníamos que entretenernos en algo, ji ji; y estuvimos en pubs, bares lounge, conciertos de rock, bares country (sí!!! country), antros, y antros versátiles (un edificio con diferentes tipos de música en cada piso).
Con lo que respecta a la música si me impresionó que, por lo menos en los lugares que visitamos, se escuchara mucha música retro ochentera. Yo iba con la idea de encontrarme algún lugar con música electrónica actual o escuchar lo que es su tiempo fuera rock alternativo (con representantes de Escocia como Glasvegas, Franz Ferdinand, The Fretellis o Bell & Sebastian), pero no, en muchos lugares se escuchaba Michael Jackson, Madonna, Black eye peas, algo de pop de moda (en ese momento Rihanna) y muchas versiones ochenteras remix como “Total Eclipse of the heart” (versión ponchi ponchi) o la de “The time of my life”, pero la original de la película “Dirty dancing” en remix, antes de que los black eye peas hicieran su propia versión bailable. Estas versiones ochenteras remix fueron las que más escuche en todos los lugares, ya sea que fueran antros, lugares country, pubs, etc. Incluso en los lugares que eran rockeros, las canciones que se escuchaban eran las clásicas de hard rock de los ochentas e inicios de los noventas, Guns and roses, Metallica, Bon Jovi, etc.
Como en todos lados, los lugares eran diferentes en ciudades como Edimburg o Glasgow, que en las pequeñas ciudades del norte de Escocia.
En este viaje empezamos en Glasgow, en un bar lounge, con mucha gente joven, música entre electrónica y pop, pero después, los éxitos ochenteros que ya comenté. Era la primera noche y al pedir un whisky en las rocas me vieron algo raro, jajaja, por la costumbre del escocés de pedir el whisky de malta pura sin nada, ni siquiera hielos.
De estos bares lounge, también hay unos que en verano tienen áreas verdes, para estar ahí con la música y tu bebida. A estos lugares se les llama también “Beer gardens”.
El siguiente día, después de estar en pubs, disfrutando de las cervezas stout y porter escocesas y una que otra Guinness, fuimos a un concierto de Rodrigo y Gabriela, grupo mexicano que al no tener suerte en México se fue a Irlanda y fue todo un éxito y de ahí a todo el resto de Europa. Hoy en México ya son reconocidos y ya se han presentado en varias ciudades y festivales mexicanos.
Durante el tour de whisky, en las noches conocíamos algunos pubs, comíamos el haggis (una especie de embutido, con apariencia no muy agradable pero realmente rico) y platicábamos con las personas locales. En Inverness, fuimos a un antro country, con toda la fachada y decoración interna como un establo, las maseras y bartenders vestidas de vaqueritas, sin embargo la música era pop, eurodisco y pop ochentero, nada de country, jajaja. Ahí al pedir una cerveza en botella, me lleve la sorpresa de las mugrosas sidras (ciders), muy populares en el Reino Unido, estas “ciders” tienen apariencia de una botella de cerveza, pero son una bebida muy clara, muy dulce y con mucho gas. Después de un rato de estar entre escoceses sintiéndose vaqueros, decidimos ir a otro antro, a uno más “rockero”, pero fue grande nuestra sorpresa que ya eran las 12 de la noche y al salir de ahí, no pudimos entran a ningún otro lugar, ni siguiera pudimos regresar al mismo lugar vaquero. Por norma todos los lugares prohíben el acceso a las 12, y si ya estas adentro te corren a las 2 am, pero nosotros ya no pudimos ingresar a ningún lugar.
Nos quedamos platicando con unas escocesas cadeneras (chicas que cuidan la entrada al antro), tratando de convencerlas que nos dejaran entrar, pero no pudimos, ellas muy simpáticas y amigables sólo nos tuvieron en la puerta platicando de Escocia y de México. Después de un tiempo de estar ahí con las cadeneras, decidimos regresar a nuestro “Bed & breakfast” (hostal) y tomar en el porche frontal un vino Australiano que llevábamos.
Siguieron días de visitas a destilerías que nos dejaban cansados. Volvimos a antrear llegando a Edimburg. En las ciudades grandes no tienen la restricción de horario como en las pequeñas ciudades. Edimburg es una ciudad muy bonita, llena de castillos y edificios increíbles.
Primero fuimos a un pub moderno, mucho más grande y con más jóvenes que los pubs tradicionales (que regularmente están llenos de personas de 30 en adelante).
En este pub moderno se piden, además de las cervezas draft, cervezas claras y las dulces “ciders” (que yo por querer probar diferentes cervezas y realmente por wey volví a pedir “otra botella de cerveza” que resultó ser de nuevo una dulce y asquerosa Cider).
Posteriormente nos fuimos a un night club, gente "mejor vestida", chicas guapas, la mayoría tomando cerveza, de repente vez a alguien tomando whisky o vodka, pero en general los jóvenes toman cervezas claras, muy diferente al pub tradicional que regularmente se toman cervezas oscuras.
Nos tocó ver en este lugar a unas chicas celebrando una despedida de soltera, llegan todas disfrazadas, de diferentes cosas, bailando entre ellas y haciendo en la pista filas de baile. Igual aquí, la música era entre pop de moda, pop ochentero y mixes retro, que era cuando se prendía más la gente.
A la salida del antro, es clásico comer "fish and chips", muy grasoso, pero rico.
Tambien de regreso al hostal veiamos escoceses algo pasados de copas.
De regreso a Glasgow fuimos de nuevo a un concierto, esta vez a ver a Marillion, grupo de rock progresivo. El concierto muy bueno, en el lugar “ABC” que también es antro cuando no tienen conciertos. Marillion es uno de mis grupos favoritos, por lo que la pase muy bien esa noche.
Más tarde nos fuimos a un antro llamado “The Garage” ubicado en Sauchiehall street (cerca de Buchanan’s street, jajaj) que tiene un auto pegado en la fachada, el lugar de 4 nivels, tiene diferentes estilos de música en cada piso: Rock, Hip-hop, Electrónico y Pop.
Moviéndonos en cada nivel de música, invariantemente en algún momento ponían música retro.
Ya a estas alturas estábamos cansados, por lo que después de unas 3 horas decidimos regresar al hotel y degustar uno de los whiskys de malta pura que habíamos comprado en las destilerías.
Al otro día seguía el viaje a Islandia pero ese será otro tema de este blog.
Gracias por leer este blog, nos vemos.
Salud.
